Por Matías Resano
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Frente a las omisiones de las autoridades judiciales, sin tener demasiadas alternativas, Ana María Pereyra implora por la seguridad y salud de su sobrino, con retraso madurativo, a quien tiene bajo su tutela.

Por el cuadro de salud, el joven permanece internado desde hace muchos años en una clínica psiquiátrica de la localidad bonaerense de Villa Adelina, la cual la mujer denuncia por malos tratos y desprotección de los internos, entre otras tantas negligencias. Justamente por un exceso en la dosis de su medicación, el paciente debió ser hospitalizado en los últimos meses en estado desesperante.

"Hace más de seis años que venimos padeciendo esto", señaló a Crónica Ana María, en referencia al período de internación de su sobrino Oscar Pereyra, de 37 años, en la Clínica Psiquiátrica Roque Arditi Rocha, en Villa Adelina.

El joven presenta un retraso madurativo, patología por la cual debió ser alojado en el establecimiento, junto a tantos otros internos pero con cuadros completamente diferentes.

Este es uno de los principales factores del reclamo de Ana María, quien contó que "mi sobrino está con otras personas que fueron colocadas allí por otras causas, con problemas psiquiátricos muy diferentes y no pueden ser mezclados unos con otros". Por esta razón, la mujer relaciona los ataques que habitualmente sufre el muchacho con esta irregularidad, que se reflejó en su caso en "la pérdida e incluso destrozos de su ropa".

Sin embargo, no se llevan a cabo las medidas de seguridad pertinentes para evitar este tipo de incidentes. En este sentido, la mujer, que posee la tutela de Oscar, dejó en claro que "no hay enfermeros y los pocos que están no han sido capacitados para asistir a pacientes psiquiátricos".

Denuncias
Por si fuera poco, la principal causa de las denuncias que realiza Ana María, sin recibir respuestas hasta el momento, radica en que "el 4 de febrero pasado mi sobrino debió ser internado porque fue sobremedicado. No es la primera vez que pasa". A su vez, la tía del joven detalló que también debió ser hospitalizado por un cuadro de anemia, con anterioridad, puesto que "la comida es mala y no son bien alimentados".

En consecuencia, exige su traslado a un neuropsiquiátrico de mayor complejidad, reflejando con angustia que "ya estamos desgastados con toda esta situación. Él tiene el derecho a estar bien y no a ser humillado por la enfermedad que tiene".