Tras nueve días de misión y bendiciones, la comunidad de Taco Pozo despidió a la Virgen del Límite, una de las advocaciones marianas más valoradas por los fieles de la localidad. Durante ese periodo, la imagen de María Inmaculada recorrió los barrios, llevando consuelo, esperanza y cercanía a las familias. La fiesta tiene como centro a la Virgen del Límite, como llaman los lugareños a la imagen que veneran a pocos kilómetros de la localidad sobre la ruta nacional 16, a metros del límite entre las provincias de Chaco y Santiago del Estero. "Nuestra Madre del Límite sale al encuentro, deseando llevarnos a Jesús. Le agradecemos por acompañarnos siempre, por escuchar nuestras necesidades, amarnos y nunca dejarnos solos", expresaron a través de las redes sociales. La peregrinación culminó con numerosos vecinos que acompañaron a la Virgen hasta su gruta. Entre oraciones, gestos de fe y un clima de gratitud, los fieles vivieron un momento emotivo al verla regresar a su lugar de resguardo. Para muchos, la presencia de María en la gruta representa protección para quienes transitan la ruta, renovando en cada visita la confianza del pueblo en su cuidado maternal. Taco Pozo, un lugar de homenajes Taco Pozo, cuyo nombre en voz quechua significa "pozo del algarrobo", rinde homenaje así a los primeros hacheros que trabajaron en la zona. La localidad está ubicada en el departamento de Almirante Brown, en el extremo oeste de la provincia del Chaco, cerca del límite con Salta y Santiago del Estero. Se formó a la vera de las vías del ferrocarril: en 1913 se estableció la estación de la línea Barranqueras-Metán, que en 1931 fue denominada Taco Pozo, nombre que adoptaría oficialmente el pueblo al ser fundado el 18 de marzo de 1935. Además de esta celebración mariana, cada 30 de agosto la comunidad festeja con gran fervor su fiesta patronal en honor a Santa Rosa de Lima, primera mujer americana declarada santa por la Iglesia católica.+